DEFENSA DE LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Las personas que formamos parte de la Asociación de Profesionales de la Narración Oral en España (AEDA) queremos manifestar nuestro rechazo ante los episodios de represión de la libertad de expresión que han sucedido últimamente en España.  

Entendemos (con Aristóteles) que el arte no es la realidad sino la imitación de lo real, y que por ello no se puede encarcelar o amordazar a quien se expresa de una manera artística. También entendemos que el arte en general, y desde luego nuestro arte narrativo, solo puede desarrollarse en un ambiente de libertad que poco tiene que ver con las leyes “mordaza”. Somos contrarios a esta corriente, auspiciada y alentada por las instituciones, de considerar todo lo que se dice en escena en sentido recto, pues todas las artes tienen como materia el mundo de lo simbólico: no hablan de lo real sino de la verdad, que no es lo mismo.

Es más, nuestro propio origen, como continuación de las comunidades que generaron todo el patrimonio inmaterial que constituye la tradición oral, está marcado por el amor a todas las manifestaciones del lenguaje: las historias tradicionales nunca se ajustaron a la expresión “políticamente correcta”, ni siquiera se producían ni se producen en la variante estándar de las lenguas, sino en el habla viva del pueblo.

Por todo ello, defendemos el derecho a expresarse libremente mediante la palabra, la voz cantada, los títeres, el pincel, la cámara... sin el temor a que suframos multas, encarcelamiento o nuestro trabajo sea apartado de los espacios públicos donde se muestra nuestro arte.