El I Curso de Literatura Popular de Altea, a propósito de «Las Rondallas valencianas en la escuela»
Con una obra polifacética y monumental, Enric Valor (Castalla, 1911 - Valencia, 2000) consiguió llenar, en el convulso siglo XX de derrotas y esperanzas, algunos vacíos importantes en la tradición lingüística y literaria de los valencianos. Y es que este gramático y escritor, además de poner orden en la adaptación de criterios gramaticales y normativos en el caso valenciano, supo encarar, como novelista, la urgencia de concretar un modelo de lengua literaria digno y equilibrado, respetuoso con los referidos principios normativos y a la vez cómplice con la expresividad espontánea y la vivacidad dialectal.
Sin embargo, el escritor de Castalla ha sido sobre todo conocido y reconocido como autor de las Rondallas valencianas: una singularísima obra inspirada en treinta y seis relatos tradicionales, elaborada durante veintiseis años (las primeras fábulas publicadas son de 1950 ; las últimas, de 1976), que constituye -sin duda- una de las creaciones literarias más valiosas y emblemáticas de las letras valencianas del siglo XX. Y es en buena justicia que las Rondallas valencianas de Enric Valor han merecido con la perspectiva del tiempo este reconocimiento. Porque en estas narraciones de raíz popular Valor literaturiza magistralmente el país inmediato; porque homenajea en cada expresión la paleta de colores que el lenguaje popular es capaz de aportar al idioma literariamente dignificado; porque sugiere caminos que enzarzan el imaginario particular de los valencianos con la compleja sinfonía de los cuentos universal.