Si indagamos en la oferta de cursos y talleres en Argentina en la actualidad, nos sorprendemos con la amplia diversidad que se ofrece. Diversidad que crece de día en día, fundamentalmente en la provincia de Buenos Aires y más aún en el área de la Capital Federal y el llamado Gran Buenos Aires.

Poder reunir en un artículo a todas las personas dedicadas a la narración en este país y a todos los talleres, es una tarea que está más allá de mis posibilidades, y mucho más aún sin haber realizado antes un relevamiento exhaustivo, que no es el caso en este escrito, por lo tanto me disculpo de antemano ante las muchas personas que no por no ser mencionadas carezcan de importancia. Sépanlo atribuir a mi desconocimiento de sus actividades, o a no estar encuadradas en lo que este texto requiere.

Dentro de este vasto espectro formativo hallamos propuestas de larga data y otras muy recientes. Unas orientadas a la llamada Narración Oral Escénica, otras remarcando el acento en la interrelación entre el teatro y la narración, e incluso las hay centradas en la Narración Oral Testimonial y la Narración Comunitaria. Existen talleres dedicados al público de la tercera edad que dan origen posterior a los grupos llamados “los abuelos/abuelas, también cuentan”. Los hay dedicados a jóvenes, e incluso a niños, y muchos al público en general.

La amplia mayoría de los talleres y cursos, fundamentalmente en Buenos Aires y posiblemente en muchos grupos de otras provincias, tienden al trabajo sobre obras literarias (u obras de autor), si bien existen quienes incluyen leyendas y cuentos populares, ya sea centrados en un área como son por poner un ejemplo: los talleres dictados por Marta Millicay sobre leyendas o los de Pedro Parcet dedicados a la tradición africana. Existe otra corriente que se centra en el relato de tinte autobiográfico, en lo que destaca la labor entre otros de Ana María Bovo. 

Intentando brindar un brevísimo panorama de los comienzos y desarrollo de la Narración Oral en el país, me atrevo; sin pretender que mi relato sea “verdad indiscutible”; a iniciar Dora Pastoriza de Etchebarne quién desde 1958 se dedicó a la narración oral, un campo muy poco transitado en ese entonces, y creó junto a Martha A. Salotti el primer Club de Narradores (1960) del cual luego nacerían otras agrupaciones, tanto en el interior del país como en el resto de Latinoamérica.

En 1965 nace El Instituto SUMMA, institución educativa fundada por Martha Salotti y Dora Pastoriza de Etchebarne, dos educadoras argentinas deseosas de concretar un proyecto educativo innovador, centrándose fundamentalmente en la valoración de la palabra, el desarrollo de la literatura infantil y la narración oral. [Sobre estos inicios os recomendamos la lectura del completo artículo de Juan Martín Tapia: Etchebarne - Salotti - Moreno: encuentros fundacionales de la narración oral argentina.]

De él surgirán muchos narradores que actualmente dictan talleres y forman profesionales, tal como sucede con Juan Marcial Moreno, que comienza a narrar en 1976 en el Club de Narradores dirigido por Dora Pastoriza. En 1982 inauguró la Narración Oral Escénica para adultos y adolescentes en café-teatros. A partir de este año su actividad se desarrolla tanto en escuelas primarias y secundarias, universidades, cafés y teatros, e inicia junto a María Héguiz una movida de cuentos para adultos en un café de San Telmo.

A fines de los 80 Francisco Garzón Céspedes, Daniel Mato, y Marcos Baliani dictaron seminarios de narración en el Centro Latinoamericano de Investigación Teatral (CELCIT) y en el Instituto Nacional de Educación Teatral (INET). Estos intercambios con los narradores locales, en cierto modo abre una corriente de pioneros en este camino de la narración oral como actividad artística y profesional. Entre los 80 ya más cerca de los 90 surgen narradores y narradoras que tallaran la ruta por la que muchos otros andarán pasado el tiempo, entre ellos: María Héguiz, Ana Padovani [ver entrevista], Ana María Bovo [ver entrevista], Marta Lorente [ver entrevista], Juana la Rosa y Elba Marinangeli, que saliendo de los espacios escolares llevan el cuento hacia el público adulto, presentando sus propios espectáculos en bares y librerías de la ciudad de Buenos Aires. 

Con el paso del tiempo su labor es requerida en escuelas y bibliotecas. Viajan al interior donde imparten talleres y narran para nuevos públicos. 

De esos y otros pioneros de la moderna movida de narración oral como actividad artística y profesional; dado que narradores, cuenteros, payadores… han existido desde siempre; algunos siguen sumamente activos al día de hoy, siendo maestros de maestros y grandes referentes, como es el caso de:

Ana María Bovo, quien fue fundadora y directora artística del proyecto pedagógico “Escuela del relato”, una institución única en su género que toma como modelo estético a las narradoras y narradores espontáneos, cotidianos. En 2011 crea “La escuela de Pensamiento Narrativo”, y en el 2013 brinda el taller intensivo sobre Relatos de Películas. Conjuntamente a sus clínicas y seminarios de perfeccionamiento, como por ejemplo el taller: Los secretos de mi oficio que dicta en el CELCIT. Simultáneamente, junto a su equipo docente, coordina talleres de Pensamiento Narrador y Montajes Literarios. Su obra Narrar, oficio trémulo (Atuel, 2002, tercera edición), ha sido distribuida por el Ministerio de Educación en todas las bibliotecas del país.

Maria Héguiz en el año 1987 inicia el proyecto “El Ñaque Argentino”, una Biblioteca Oral Circulante con la que promociona la lectura a través de la narración de cuentos, visitando escuelas y bibliotecas de todo el país. A partir de esta experiencia, en el año 2000, propone el proyecto de su autoría “Contar con Todos”, a dicha Dirección de Bibliotecas, para la creación de Centros de Narración y Lectura comunitaria en la Provincia. Se concretan múltiples experiencias y se crean varios grupos que actualmente están en funcionamiento con intensa actividad, promoviendo interesantes proyectos regionales (Chascomús, Baradero, Junín, La Plata, entre otros). Nace así la ELNS, (Escuela de Lectura y Narración Social) y en 2007 crea: Argentina Narrada Comunidades y Libros asociación civil no gubernamental sin fines de lucro.

Ana Padovani actriz y narradora oral, otra de las pioneras de la narración oral en la Argentina, autora entre otros, de los libros Escenarios de la narración oral (Paidós, 2015) y Contar cuentos (Paidós, 1999), que oficia como una guía práctica para quien desea relatar (y que ha alcanzado varias reediciones desde su aparición en 1999). Formadora de narradores, es una de las mentoras de los Encuentros de narradores que todos los años se realizan en la Feria del Libro [ver artículo].

Marcela Sabio, con una sólida e intensa trayectoria como respaldo desde 1997, es delega en Argentina de Cátedras y Foros Internacionales (FINO) en el arte de la narración oral, dirigiendo todos sus eventos nacionales e internacionales, así como también el Festival "SANTA FE DE CUENTOS". Suma a sus actividades ser directora de la agrupación de narradores orales escénicos PURO CUENTO y del programa de acción en torno a la oralidad y narración oral LA OREJA VERDE.

Co-funda y preside la Biblioteca Popular Juglares sin Fronteras, coordinando diferentes acciones de animación lectora, como el dispositivo La mochila de los sueños y el Museo cervantino itinerante "de la quijotada andante". Y dentro de la difusión editorial ha publicado el libro: NARRACIÓN ORAL ESCÉNICA: El arte de leer el mundo con todo el cuerpo y a VIVA VOZ.

Otra de las pioneras, en este caso de la movida  cuentera en Neuquén es Ileana Panelo  quien también se formó inicialmente en el instituto Summa, y luego concentró su tarea en la provincia de Neuquén. Es tallerista, promotora cultural y formadora de narradores, llevando a cabo un importante trabajo en el Hospital Pediátrico Castro Rendón, iniciado con su grupo para el Programa “Leer en salud” en la sala de segunda infancia en 1989. Ha publicado: Cuentos del sana-sana (ed. de la autora, Neuquén, 1998).

Marta Lorente formada entre otros por Daniel Mato y Francisco Garzón Céspedes a mediados de los 80, fue fundadora del grupo “Los Cuenteros”, y posteriormente fundó, (junto con José Campanari), y dirige, el periódico Cuentos al día. Además de realizar como el resto de los narradores sus presentaciones, dicta talleres de narración oral y dirige el grupo "Gente de palabra".

Dora Apo, narradora argentina con una prestigiosa trayectoria, formadora de muchos narradores, entre ellos Claudio Ledesma, hoy formador él mismo, de los miembros del grupo "Déjame que te cuente", del grupo "Paranátecuento" y tantos otros.

Elva Marinangeli, es miembro fundadora e integrante hasta 2013 de la Comisión Ejecutiva Organizadora de los Encuentros Internacionales de Narradores que se llevan a cabo en el marco de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. Dirige un taller “El arte de contar cuentos” en el museo Larreta.

Diana Tarnofky quien se formó con Marta Lorente, Juana La Rosa y muchos otros, además de coordinar talleres de capacitación para maestros, estudiantes de profesorados, bibliotecarios, profesionales de la salud, es parte de la organización de los encuentros de la Feria del Libro.

Juana La Rosa, ex integrante del grupo "Los cuenteros", uno de los pioneros del género, creado en 1987, de donde también salieron Ana María Bovo, Marta Lorente y Mirian García, entre otros narradores. Sigue al día de hoy brindando sus talleres de formación

En el año 1999 se aprueba una Tecnicatura en narración oral en Buenos Aires, con un programa de capacitación de dos años de duración en Adeno (INSTITUTO ARGENTINO DE NARRACIÓN ORAL) Jovita Savino es la creadora del proyecto. 

Más tarde nace el programa de Abuelas Cuentacuentos, impulsado por la Fundación Mempo Giardinelli desde la ciudad de Resistencia, que ya se ha extendido a más de 10 provincias y ha obtenido reconocimiento internacional por su labor en animación a la lectura.

Poco a poco surgen Cátedras libres de narración oral en la ciudad de Córdoba, la Plata y Paraná.

Entre los muchos narradores de hoy en día hay quienes se dedican a voluntariados en zonas de vulnerabilidad como es el caso de Elena Santa Cruz, que trabaja en espacios de reclusión, en hospitales, en sectores de vulnerabilidad con sus títeres y su palabra, en una magnífica tarea voluntaria. También recorre el país yendo a zonas de pobreza.

Similar labor, aunque con sus propias características lleva acabo desde tiempos más recientes, José Luis Gallego, alumno de Juan Marcial Moreno, coordinando talleres de cuenteros para niños y en el Centro Universitario San Martín (Unidad 48 del Penal de José León Suárez). Dicta encuentros de capacitación en narración oral como por ejemplo en el marco del programa Bibliotecas Activas en Escuelas Hospitalarias y Domiciliarias. Y VIVALECTURA al proyecto de cuentacuentos que desarrollan su actividad en el Hospital Garraham (hospital pediátrico de alta complejidad).

Como uno de los muchos ejemplo de narradores dedicados a capacitar en áreas distintas encontramos por ejemplo a Elizabeth Gothelf: narradora ral egresada de La escuela del Relato de Ana María Bovo, que se centra en ámbitos escolares tanto como en la capacitación docente y en la capacitación laboral en empresas, organizaciones profesionales y comunitarias, formación de coordinadores de grupos, líderes de equipos, y profesionales de la salud. Dicta seminarios de Narración aplicada al liderazgo y a mejorar las habilidades de comunicación.

Además de los cursos, seminarios, y talleres brindados por los profesionales ya mencionados encontramos un sinfín de cursos de capacitación desde lo más grupal a lo más individual. Incluso cursos, seminarios y talleres organizado oficialmente, tales como Plan nacional de lectura, Abuelos narradores: Capacitación docente, Programas de historia oral, Programas de animación cultural, Cátedras libres de narración, como las que ya existen en La Plata y en Córdoba en forma de extensión universitaria. El Programa “Abuela Relatoras por la Identidad, la Memoria y la Inclusión Social” (La Matanza), que dio inicio en marzo de 2006. Y en el interior por ejemplo encontramos a los Cuentacuentos Nicoleños integrantes del grupo de voluntarios de la Biblioteca Barrio del Carmen «Cuentacuentos Nicoleños» que prepara, entre otras iniciativas, la publicación de su segundo libro en el que recopilarán anécdotas y vivencias e incluirán los dibujos recibidos de los niños y sus expresiones frente a los cuentos narrados. 

La lista de quienes dictan talleres y seminarios es, sino interminable, sumamente extensa, con mayor concentración en la provincia de Buenos Aires, y menos en el interior del país. Hay quienes forman escuelas como es el caso por ejemplo de Claudio Ledesma, alumno de Dora Apo, director del Festival Internacional de Cuentacuentos (primero 2002), ha coordinado jornadas internacionales de literatura infantil y juvenil, creó y dirige el Círculo de Cuentacuentos y la publicación “Te doy mi palabra", noticias de los cuentacuentos, y su recién fundada  “Cuentería. Escuela Latinoamericana de Cuentacuentos” , abierta en 2015 como ampliación de los talleres que venía brindando junto a su equipo, que busca dar un marco más formal a la formación del narrador oral. En esta escuela ofrece un laboratorio mensual llamado “La Cocina del Narrador”, el último sábado de cada mes. Pedro Parcet que dicta talleres continuos a varios grupos y organiza junto a Lucia Blomberg el festival Hecho en Argentina, Claudio Ferraro que en la actualidad tiene a su cargo 11 cátedras de Narración Oral de cuentos en diversos Institutos de Formación Docente dependientes del Ministerio de Educación de la CABA y tantos otros que en sus zonas: Oeste, Sur, La Plata, Norte y en las provincias, llevan más o menos años formando narradores y organizando contadas. 

Por otro lado están los talleristas y aquellos que dan cursos breves, no quiero ponerme a nombrar a cada uno pues más allá de lo extensa que resultaría la lista, no lo permite la extensión misma del artículo, pero sí considero importante señalar que en el presente día a día se multiplican los cursos y talleres, sumándose a los profesionales de más larga trayectoria muchos de más reciente formación, lo que muchas veces genera en quien desea aprender cierta confusión a la hora de elegir. 

Si bien una mayoría de pioneros de la narración oral profesional se encuentran en Buenos Aires, cabe destacar otros centros importantes en el interior del país. Algunos ya nombrados como la tarea de la fundación Mempo Giardinelli en el Chaco y la de Ileana Panelo en Neuquén, a la que se le ha sumado hace tiempo a El Hache (así se conoce a Hugo Herrera), un neuquino que desde 1990 participa como narrador oral en diferentes encuentros nacionales e internacionales. Acostumbra a dictar talleres de Iniciación a la Narración Oral para todo público y con orientación a personas con discapacidad en General Roca, Centenario y en Neuquén desde 2007 y hasta la fecha. Es el director de la Escuela Patagónica de Narración Oral además de docente. Desde 2011 y hasta hoy es coordinador de la Comisión Organizadora del Festival Internacional de Cuentacuentos HABLALAPALABRA.

A Maryta Berenguer, de Bahía Blanca, quien se inició como realizadora de espacios radiofónicos infantiles de gran calidad en L.U.3 y Radio Nacional a principios de los ’80. Fue capacitadora en los Programas Nacionales de Lectura y de la CONABIP en “Creando Lazos de Lectura”. Es ensayista y narradora oral de trascendencia nacional e internacional y fundadora y presidenta de la Biblioteca Pajarita De Papel que tiene sede en el Ex-Hotel de Inmigrantes en la ciudad de Bahía Blanca.. Maestra de narración, directora de las escuelas de narración oral y lectura en el MUSEO ARGENTINO DEL TÍTERE de la ciudad de Buenos Aires, Estudio de la Palabra de Bahía Blanca y ABIDELP-Universidad de Santa Rosa, La Pampa. Directora artística de la "CITA DE NARRADORES ORALES", (Festival de Bahía Blanca), que se realiza en las ciudades sedes de las escuelas de narración que dirige.

En Córdoba  reside Alicia Perrig: que coordina el Taller de Narradores Orales del Programa de Extensión Universitaria para Adultos Mayores (PEUAM) de la Universidad Nacional de Villa María. 

Alejandra Oliver Gulle que dirige con Rubén López, el CUENTO PALABRA Festival, Foro y Encuentro Internacional de Córdoba y la Escuela de Cuentería: DICHO Y HECHO. Coordinadora por Argentina de la Red Latinoamericana de Cuentería. Integra junto al escritor Eduardo Chaves el Grupo de narradores y capacitadores Cuéntame Mucho. 

Eduardo Chaves: conductor de "El Andén de los Juglares" grupo de escritores, poetas, narradores y músicos, espacio de encuentro con micrófono abierto sostenido en la ciudad de Córdoba/ Argentina desde 1996. Miembro de la Red Latinoamericana de Cuentería. Coordinador de talleres de creación literaria desde 1998. Miembro del equipo del Festival Internacional CuentoPalabra. Docente de la Escuela de Cuentería Dicho y Hecho. 

Rubén López: Miembro fundador y coordinador del "Venique Tecuento" espacio comunitario de narración oral desde 1999. Co-Director del Festival Internacional CUENTO PALABRA, junto a Alejandra Oliver Gulle, desde 2001 y del Foro Internacional de Oralidad y Literatura, desde 2007. Co-Director de la Escuela de Cuentería DICHO y HECHO desde 2008. Responsable del proyecyo ContARTE en el Museo desde 2003, en el Museo de la Estancia Jesuítica de Alta Gracia.

Y también al grupo el Caldero de los Cuentos que mantienen regularmente la actividad a partir de encuentros.

En Paraná, Entre Ríos, está el grupo de narración oral Paranatecuento que transita hace 22 años por la capital entrerriana. Y también en la ciudad de Paraná se dicta el taller de narración oral La Fábrica de Historias. Actividad coordinada por Malena Sarrot y Víctor Eloy Villarraza

Dentro de la Provincia de Buenos Aires  está el Taller de Narración Oral “Nuestra voz nos libera y deja huella”, coordinado por Lali Odello y Alejandra Codesal en el Partido 9 de julio. 

Estos son apenas algunos ejemplos de los muchos que existen.

Un tema importante son los espacios de debate y encuentro. Respecto de este tema, a mi modo de ver, aún nos hace falta mucho desarrollo, si bien en los últimos años se han logrado conquistar más posibilidades, lo cierto es que la mayoría de estos espacios se dan de grupos de pertenencia o bien en los encuentros anuales de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires y en los diversos festivales que se realizan a lo largo y ancho del país. 

Los medios de difusión especializados en narración oral, en la Argentina van aumentando de día en día si bien aún no suelen alcanzar un espacio masivo, entre ellos puedo nombrar (disculpen lo que me faltan): "Cuentos al día" dirigido por Marta Lorente desde marzo de 1997, con versión en papel y en la WEB. “Te doy mi palabra” del Círculo de cuentacuentos; un mensuario en papel y en la WEB que surgió a finales del 2000. Marita Von Saltzen: quién estudio con Dora Pastoriza de Etchebarne, Juan Marcial Moreno, y luego con muchos otros narradores, incluso en la Escuela del Relato de Ana María Bovo; es la creadora de BlaBlerías, una revista digital para narradores orales, escritores y amantes de la Literatura oral y escrita. Imaginaria: Revista electrónica quincenal de literatura infantil y Juvenil, actualmente alojada en Educared en la cual hay un lugar destacado para la narración. Y dado el auge de la tecnología mucha información circula por redes sociales y páginas web

También hay espacios de reflexión y formación en algunos de los festivales que se celebran en Argentina. 

El crecimiento de la actividad lleva a la convocatoria del Primer Encuentro de Narradores en la Feria del Libro de Buenos Aires en abril de 1996 organizado por la Fundación el Libro, la Asociación de Literatura Juvenil e Infantil, el Instituto Summa y narradores independientes, cada año con mayor repercusión de público e inscriptos

Paralelamente han aparecido varios festivales de narración en el interior del país, especialmente en la provincia de Córdoba y en la región metropolitana de Buenos Aires, zonas en las que, además, se concentran la mayoría de los espectáculos y talleres. Se multiplican los encuentros y coloquios sobre narración que reúnen a diversos especialistas, así como las publicaciones especializadas. 

La feria del libro con su encuentro de narradores ofrece talleres, conferencias y mesas redondas, visita de especialistas nacionales y extranjeros y brinda oportunidad de escuchar a narradores de diversos orígenes y estilos. En el marco de la Feria del Libro, en 1996, se inscribieron 160 profesionales. En 2012 ese evento cerró las inscripciones con el cupo completo, unos 700 narradores. También, desde 1996, el Círculo de Cuentacuentos de Buenos Aires organiza el Festival Internacional de Narración Oral. La difusión de la narración oral se dio en la última década.

En la actualidad los festivales también se multiplican, e incluso establecen alianzas entrelazándose unos a otros [más información sobre festivales y EnlazaPalabras en este artículo de Claudio Pansera: Una mirada sobre festivales de narración oral en Argentina]. Por nombrar aquellos de los que tengo referencia, sepan disculpar si he olvidado alguno, tenemos:

  • El Festival Santa Fe de Cuentos, en la provincia de Santa Fe.
  • CuentoPalabra Festival Internacional de Cuentacuentos en Córdoba: Organizados por los narradores Garba y Rubén López, la actividad cuenta con el aval del Instituto Nacional del Teatro, la Red Latinoamericana de Cuentería y la Escuela de Letras de la FFyH. El festival nació con la idea de promover el arte de narrar, el encuentro de los narradores y fortalecer el movimiento de narradores latinoamericanos.
  • Este año se lleva a cabo también el 1° NaRRaENCUENTRO Argentino de Escuelas y Talleres de contadores de Historias de Córdoba, Argentina y el Mundo, en Huerta Grande, Córdoba, organizado por Alejandra Oliver Gulle y Claudia Class.
  • Festival Internacional de Cuentacuentos “Palabra Mía”, que está compuesto por un circuito de festivales latinos e iberoamericanos de narración oral, organizado por Claudio Ledesma y su equipo.
  • Festival Internacional de Cuentacuentos “Tutú Marambá” en Misiones, organizado por La Biblioteca Pública De Las Misiones.
  • Festival Internacional de Narración Oral Escénica “Chaco te doy mi palabra”. Este evento es organizado por Cuentería: Escuela Latinoamérica de Cuentacuentos, el Instituto de Cultura del Chaco y cuenta con el apoyo del Instituto Nacional del Teatro, las municipalidades de Puerto Tirol, Puerto Vilelas, Barranqueras, Colonia Popular y General San Martín.
  • Desde 2003- “Encuentro Itinerante de Narradores de Cuentos del Valle de Punilla”
  • Alicia Tealdi y Paula Fontana organizan el festival de cuentacuentos Dicen que dicen en San Carlos de Bariloche que funciona como extensión de otros festivales aunque con sus propias características (este año ha celebrado su segunda edición).
  • Pa´Labrar Festival Internacional de cuentacuentos (Mendoza, Argentina).
  • Desde 2009-Festival Internacional de Cuentacuentos de Tucumán “Narradores en Acción”. El evento de Tucumán es una de las  sub-sedes del Festival Internacional de Cuentacuentos “Palabra mía”. El grupo Los Cuenteros, organizador del evento en Tucumán, ha propiciado la realización de esta actividad artística en las provincias de Salta y Jujuy, convirtiendo así a la región del NOA en una sede de esta fiesta de la palabra y de las historias contadas por profesionales. Alejandra Jiménez
  • Hecho en Argentina organizado por Pedro Parcet y Lucía Blomberg.
  • Este año se ha organizado el Festival Internacional de la Palabra en Escena, en San Luis, organizado por el grupo de teatro ReVenir (Daiana, Vatto y Sandra).
  • Desde 2002 surge el festival Palabras más, palabras menos, organizado por Claudio Pansera y su equipo

En todos estos festivales junto a los espectáculos ofrecidos, profesionales argentinos y extranjeros (muchos de estos extranjeros son residentes en el país), dictan talleres y clínicas de formación, dan charlas sobre temas diversos, lo que sobre todo posibilita a los narradores del interior, que tienen menos oportunidades de contactar con variedad de miradas, descubrir algunas nuevas en estos encuentros. También en cierto modo las redes de interconexión que establecen los festivales, facilitan que narradores de buenos aires y narradores del interior compartan experiencias, tema importante en un país como el nuestro en el que por lo general capital e interior parecen mundos separados. En su aspecto complejo este entremezclarse de los festivales dificulta a veces entender si se trata de un festival o de varios simultáneos, y por lo tanto cuál es la propuesta clara de cada uno.

Además de estos festivales se organizan algunos encuentros itinerantes o locales que reúnen a narradores de distintos puntos del país.

Espero con esto haber brindado un somero panorama del estado de los espacios de encuentro y formación en el país. Sé que queda mucho por decir y mucho por andar, pero andando se hace el camino y al caminar el contar.

Ana Cuevas Unamuno