El Taller de narración oral de Borrón y cuento nuevo es un taller y no es un curso, es decir, no buscamos compartir contenidos (aunque están), sino crear un espacio de experimentación divertido y confortable, por lo tanto, un espacio donde arriesgarse, ponerse en juego, equivocarse y permitirnos hacer las cosas mal. Lo que está en juego es nuestro aprendizaje, que en el caso de nuestro taller es el descubrimiento de la propia voz. 

Entendemos que para ser narrador  hay que ser  honesto, verdadero con lo que uno es, aunque estemos en constante cambio o evolución. Por esto, por ser un lugar de experimentación, nos parece interesante mezclar distintos niveles (iniciación y avanzados), donde cada cual sigue su propio proceso a partir de nuestras propuestas. Estos aprendizajes se comparten, haciendo la experiencia más enriquecedora.

Nuestro planteamiento inicial de los talleres es que sean intensivos o trimestrales, pero a lo largo de estos años, los alumnos nos han ido demandando la ampliación de los talleres a cursos anuales. Es por eso que hemos tenido la suerte de ver el crecimiento de muchos de nuestros alumnos a lo largo de varios años. Y ellos han visto el nuestro, porque aprendemos con ellos. El taller es un espacio vivo, en evolución. El constante intercambio hace que nosotros y las dinámicas del taller vayan innovándose. En cada periodo del taller, la mecánica la establecemos entre todos. Los ejercicios y los trabajos dependen del grupo y de cada individuo. 

Desde hace tres años, dentro de la programación de la FLLIC se viene realizando un seminario específico sobre narración oral.

El planteamiento de llevar a cabo este seminario vino dado por dos razones básicas: 

  • La creciente expectación que sigue provocando el festival D'Palabra en el público asistente.
  • La eficiencia demostrada del cuento como herramienta óptima en aspectos como animación lectora, recurso didáctico o de intervención social y cultural.

Por ello, en estos tres años de andadura hemos intentado afrontar aspectos tan básicos y elementales como el cuento en el hogar, en la escuela, el cuento con objetos, con música, los valores en el cuento; contando siempre con profesionales que presentan experiencias concretas y reales, con espacios para la reflexión y el intercambio, no solo dentro del mundo de la narración, sino de distintos ámbitos y disciplinas para obtener así una perspectiva más amplia y global.

En el de este año, por ejemplo, contamos con Samuel Alonso, Raúl Vacas y Gonzalo Moure como ponentes en el primer día. Tres escritores “valientes” con una literatura que no deja impasible a quien la lee. 

En el seminario hay ponencias, talleres, mesas redondas y debates. La formación se da, entonces, de manera práctica, vivencial y participativa, que es, consideramos, la mejor manera para que estas propuestas se lleven adelante y tengan sentido entre los asistentes que proceden del mundo de las escuelas, las bibliotecas, la gestión cultural y la propia narración. Sus valoraciones son muy positivas tratamos de tener en cuenta las sugerencias que cada año nos facilitan.